sábado, 22 de agosto de 2015

Estrellas fugaces

¿Y si te dijera que lo he conseguido?
¿Que soy capaz de guardar un secreto, capaz de ver las bellezas del mundo y capaz de verme a mí?
Y es cierto, cada día al despertar seguía una rutina impuesta por las fatales horas de sueño, y entre etílicos olores era capaz de amanecer, lavarme o no la cara y tirar hacia delante, hacía una noche más.
Y que han sido perfectas.
¿Y si te dijera que lo he conseguido un año más?
¿Que sin darme cuenta he disfrutado de todos los placeres de la vida?
Y realmente, cada año he vivido como si fuera el último, como que merecía ser recordado y cada año ha formado una locura de vida llamada mi pasado. 
¿Y si te dijera que no me importa el tiempo?
¿Que el pasado tiene la misma poca importancia que el futuro?
Y de verdad me gustaría decírtelo, que he tocado mis sueños con las puntas de los dedos y he pedido deseos a estrellas fugaces, y que fugaz me parece ahora todo. Y es que la vida es tan corta a veces y tal intensa otras. 
Que si te dijera que lo único que corre por mis venas son las ganas me levantarías colocándome encima de tus hombros y me acercarías a la luna. 
¿Y si te dijera que con mi alma guardo las cuatro lunas en el baúl? ¿Qué me mata la idea de esperar cuatro años más?
Y en la realidad no haría falta esperar, pero en este mundo encuadernado entre palabras y más palabras que dan sentido a los sentidos te diría que las pasiones mueven mundos.

¿Y qué sería de nosotros sin nuestros secretos mundos?